Un total de 25 personas, entre menores y mayores de edad, fueron rescatadas del trabajo en un horno ladrillero, en la localidad de Alpachiri. Es un posible caso de trata de personas y trabajo infantil. Las personas estaban  bajo el mando de un hombre oriundo de Mendoza.

El intendente del lugar, Rubén Müller, comentó en diálogo con Lv4 cómo se descubrió esta red que mantenía en condiciones ilegales a trabajadores de Salto de las Rosas en La Pampa.

En Alpachiri “funcionaba un horno de ladrillos y el día jueves de la semana pasada, justo con este cambio de temperatura, se acercó una familia al Municipio, diciendo que vivía en el horno con cuatro niños y los adultos en una casilla”-relató.

Era un colectivo adaptado como casilla y las personas fueron a pedir frazada porque hacía frio y necesitaban abrigarse. Dado que la trabajadora social no estaba disponible en ese momento el intendente se dirigió a la comisaría de Alpachiri “a decirle al señor comisario a ver si él estaba en conocimiento de que había más gente en ese horno y cómo estaban viviendo”-contó.

Müller expresó que los hechos se precipitaron porque ellos no podían permitir que esas personas continuaran viviendo así, “en un colectivo -dijo- imagínese si prenden un brasero y pasa algo con el monóxido. La verdad que no podíamos dejar que sucediera nada grave.”

El comisario llamó a gente de la justicia de la provincia, al ministerio de Trabajo quienes realizaron un procedimiento y se encontraron con que había 25 personas trabajando allí procedentes de Salto de las Rosas de San Rafael, Mendoza.

El intendente dijo que se trata de un solo horno que funciona en el lugar y ya no se consigue allí más gente para trabajar en eso. “Pero a nosotros lo que nos interesa (son las condiciones) porque cuando se hizo el operativo se encontraron con que vivían ahí 32 personas, que tenían un solo baño (tipo letrina) con 17 niños, más los adultos, con mujeres embarazadas.”

Finalmente comentó que tras ser albergados por el Municipio por unos días, muchas personas fueron trasladadas a su lugar de origen porque el horno ha sido, momentáneamente, clausurado.