Durante la jornada del sábado, la zona de Potrerillos fue afectada por viento zonda, con un alto nivel de destrucción. Se quemaron unas 30 cabañas.

Guillermo Ferraris, coordinador del Plan Provincial de Manejo del Fuego, en diálogo con LV4 mencionó que fueron varias las viviendas afectadas y que hubo una significativa cantidad de caídas de árboles y ramas, debido a la intensidad del viento. Hubo además algunos incendios.

“El viento zonda no genera incendios, lo único que hace es que ayuda a propagarlos. Si hubo algún incendio, alguien tuvo que poner un fósforo. En este caso no sabemos si se inició por la caída de algún tendido eléctrico, o porque alguien haya dejado algún fuego mal apagado. En esta época también la gente acostumbra quemar hojas. Y en este lugar, que es eminentemente turístico, suele darse esto”.

Personal del Plan de Manejo del Fuego debió actuar en forma conjunta con Defensa Civil  y se informó que se quemaron en un 100% al menos 30 cabañas.

“Desde el momento en que se dio el aviso, el director de Defensa Civil se hizo cargo y se dio el aviso a todas las áreas  que habitualmente actúan. Hubo también mucha gente que no quería dejar sus hogares. En este caso fue un poco más simple, porque la mayoría de la gente eran turistas o bien gente que estaba en su casa de fin de semana, entonces no tiene el mismo apego, entonces no hubo tanta resistencia al desalojo”, sostuvo Ferraris.

Hubo personas que pudieron autoevacuarse y otros a quienes se debió asistir, porque habían llegado en transporte público, por lo que actuaron con móviles de la fuerza pública.

En relación al trabajo realizado para apagar incendios, mencionó que “se hizo lo que se pudo, teniendo en cuenta que el viento se mantuvo en forma constante a unos 110 km. durante unas 8 horas, sin que disminuyera”.

Hubo destrucción total en al menos 30 cabañas